Con hambre no hay cuarentena posible

El Frente de Lucha Piquetero realizó una jornada nacional exigiendo al gobierno entrega de 

alimentos y elementos de higiene, además del cumplimiento con el pago del IFE a los más de once millones que lo solicitaron.

La medida se hizo efectiva luego de tener varias reuniones presenciales y por video conferencia con el ministro de Desarrollo Social y otros funcionarios de primera línea de esa cartera, los cuales solo recomendaban esperar a que los proveedores de mercadería presenten ofertas y se abran las licitaciones, cosa que estaba difícil porque los fabricantes de alimentos se negaban a licitar al precio de lista.

La jornada de lucha se cumplió en gran parte del país. Los compañeros se movilizaron con sus barbijos, dejando la distancia suficiente, muchos exhibieron carteles y pancartas con los reclamos desde las ollas populares, comedores y merenderos. En Resistencia (Chaco) la policía del gobernador Capitanich detuvo a ocho manifestantes, cinco de CUBa-MTR y tres del Polo Obrero, que fueron trasladados a la comisaría 2º de Resistencia y quedaron en libertad horas más tarde debido a la importante solidaridad de organizaciones piqueteras, sociales, sindicales y de partidos políticos, entre otras.

La actividad concluyó luego de varias horas de protesta, cuando fueron recibidos en diferentes provincias dirigentes de las organizaciones presentes. En el caso de Nación el funcionario a cargo se comprometió a hacer efectiva la entrega de alimentos secos y otros elementos en siente días, además de que se efectuaría en las próximas horas el pago del IFE.

En esta cuarentena se pierde la “changa” que siempre arrima un peso a los hogares humildes. La remarcación de los alimentos es imparable. La situación en las barriadas populares es cada día más dura. Es difícil cumplir con la cuarentena sin un plato de comida, o “quedarse en casa” si hay que ir a buscar agua con baldes a la canilla más cercana que está a 200 metros. El pretendido cumplimiento a rajatabla se desoye cuando se vive en condiciones de hacinamiento.  

Si no hay un verdadero cumplimiento con los puntos exigidos, volveremos a las calles. No permitiremos que el control sea sobre la población y no sobre las empresas fabricantes de alimentos que especulan en este estado de pandemia, suspenden y despiden trabajadores. Es necesario que el gobierno toque los intereses de los grandes capitales en favor del pueblo, y deje de administrar la pobreza ejerciendo el control social. 

Oscar Kuperman