Las recientes elecciones de diputados al Parlamento Europeo, realizadas entre el 6 y 9 de junio del corriente año en medio de crecientes tensiones entre la Unión Europea y Rusia a propósito de la guerra en Ucrania, la progresiva rivalidad de Europa y China en materia comercial, y el apoyo de Europa al sionismo en la Franja de Gaza, han puesto sobre el tapete el sentido general de la política europea en todos y cada uno de estos escenarios, siempre subordinada a la voz de mando norteamericana, la cual, lejos de servir al crecimiento, no ha hecho más que poner en franco declive al Estado de b