Epitafios de impunidad: Blaquier murió sin condena

Sábado, 8. Abril 2023

Un epitafio es una escritura sobre la muerte. La inscripción se da habitualmente sobre una lápida con el nombre de la persona difunta pero puede tener otras expresiones. En Argentina los diarios tienen su sección de avisos fúnebres donde unas pocas palabras honran o despiden a los muertos. De las infinitas consecuencias que tuvo la dictadura en nuestro país puede tomarse la arista de lo que significó para el pueblo no tener un lugar donde realizar una inscripción para todos aquellos compañeros y compañeras detenidos-desaparecidos.

Por esta vía de epitafios e inscripción de la muerte, puede verse hoy la impunidad de la gran burguesía monopólica, sus representantes y aliados políticos. El 13 de marzo de 2023 murió Carlos Pedro Blaquier, uno de los representantes de esa clase social. Murió sin haber sido juzgado por crímenes de lesa humanidad como cómplice primario en la Noche del Apagón durante la última dictadura militar. 

Los saludos-epitafios que le fueron dedicados abarcan a un amplio espectro de las clases dominantes. Macri describe a Blaquier como “uno de los empresarios más importantes del país y un referente de la agroindustria”. Larreta por su parte habla de un “triste momento” y despide a su familia con “mucho cariño”. Inscripciones de múltiples sectores empresariales como Paolo Rocca (Techint) Luis Pagani (Arcor) o Juan Carlos Bago (laboratorios Bagó). De herederos de la dictadura como los familiares de Martínez de Hoz, Domingo Cavallo, universidades privadas, los directivos de la Unión Industrial Argentina, la Bolsa de Comercio de Buenos Aires y un largo etcétera. De alguna manera, esos escritos configuran y concentran a los garantes de un modelo de Argentina dependiente atada al imperialismo.

Blaquier fue un colaborador activo en la Noche del Apagón en Libertador General de San Martín y Calilegua, Jujuy, donde secuestraron a 400 personas -de las que 55 continúan desaparecidas- en la semana del 20 de julio de 1976 con los autos del Ingenio Ledesma. Ello se entiende en el marco de que el finado ocupó el puesto de director de la empresa por 43 años, acomodándose a todos los gobiernos. En 1974, meses antes de retornar a la presidencia, Perón le regaló su bastón de mando. Del kirchnerismo supo opinar que “pocos gobiernos han defendido la industria nacional como este”: quizás haya incidido en esa valoración el hecho de que, por aquellos años, Ledesma se vio favorecida en los repartos de cupos para el abastecimiento de bioetanol. 

La empresa no solo produce azúcar sino que se ha diversificado a otras ramas y provincias. Papel y cuadernos que llevan la firma Ledesma, alcohol, almidones, jarabes, aceite, frutíferos; desde el 94 participa en el negocio de los hidrocarburos, concentra tierras para la producción agrícola y ganadera, y en el 2010 inauguró una planta de bioetanol. Todo este desarrollo sobre la sangre derramada de una generación y sus ideas.

En el año 2012 Blaquier y Alberto Lemos, administrador del Ingenio, fueron procesados por los hechos de la Noche del Apagón. Tras la apelación de la defensa, en 2015 la Cámara de Casación dictaron la falta de mérito para ambos. Esta decisión fue anulada por la Corte Suprema en 2022. A partir de allí la estrategia de la defensa fue alegar que Blaquier no estaba en condiciones de afrontar el juicio por problemas de salud. Plan exitoso: Blaquier se murió impune.

Pero la impunidad no es suficiente para borrar la experiencia del clasismo y el desarrollo de un proyecto de liberación nacional y social que tuvo sus bases en el Cordobazo, en el Sitrac-Sitram y en la generación del 60 y del 70. Que no solo luchó contra la dictadura sino que elaboró las bases para una disputa que todavía está abierta. De esas experiencias quedan las lecciones para la construcción de un sindicalismo antiburocrático, combativo y por el clasismo gracias a compañeros que se organizaron en el ingenio Ledesma como Jorge Weisz y Carlos Patrignani de Vanguardia Comunista, quienes confluyeron con los referentes de distintas expresiones populares, cuya figura más importante fue el radical Luis Arédez.  Experiencias que además de las luchas tienen la perspectiva de la revolución. 

Los Weisz, los Patrignani, los Arédez; todos los represaliados por el empresariado que se enriqueció con la dictadura, van a estar marchando junto a cientos de miles en todo el país este 24 de Marzo. Siguen vivos, porque cayeron defendiendo una causa inmortal. Los herederos políticos y económicos de los Blaquier todavía tienen cuentas sin pagar, que más temprano que tarde serán cobradas por la lucha popular con los trabajadores a la cabeza.

¡Jorge Weisz, Carlos Patrignani, Luis Arédez, presentes!

¡30.000 compañeros detenidos desaparecidos presentes!

¡Cárcel a todos los milicos y los civiles colaboradores y beneficiarios!

No olvidamos, no perdonamos, no nos reconciliamos.

Sábado, Abril 8, 2023 - 19:15

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