El avance de las SAD en el fútbol argentino

Martes, 11. Marzo 2025
El avance de las SAD en el fútbol argentino

El fútbol argentino se encuentra en una encrucijada. La posibilidad de que los clubes adopten el modelo de Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) ha resurgido con fuerza desde la llegada de Javier Milei a la presidencia y se profundizó a partir del decreto presidencial que flexibiliza su implementación. Si bien durante la campaña presidencial del 2023 la mayoría de las instituciones habían declarado estar en contra de este plan y aún operan como asociaciones civiles sin fines de lucro, la llegada de capitales privados, con el resonante caso de Estudiantes de La Plata, marca el inicio de un proceso de transformación que podría alterar de manera estructural el deporte más popular del país.

El modelo

Las SAD no son una novedad en el mundo. En Europa, varios países han adoptado este esquema con resultados dispares. Si bien algunos clubes han prosperado bajo la administración de inversores privados, otros han sufrido crisis financieras y una pérdida de identidad que ha generado un profundo descontento en sus hinchas.

En América Latina, distintas ligas han aplicado este modelo generando controversia. En Chile la privatización de los clubes derivó en problemas de gestión y endeudamiento; además se acusa a estas nuevas gestiones de no invertir en inferiores, lo que ha deteriorado el semillero de cada club y muchos aducen que los malos resultados de la selección nacional están estrechamente ligados a este desfinanciamiento. En México, la eliminación del ascenso y descenso en su liga profesional estuvo vinculada a la estructura de las SAD, lo que generó un modelo altamente lucrativo para unos pocos, pero perjudicial para la competitividad del torneo.

En nuestro país el modelo de asociaciones civiles ha permitido que los clubes mantengan su carácter social y comunitario, funcionando no solo como instituciones deportivas, sino también como espacios de contención y desarrollo para miles de jóvenes. Sin embargo, las malas gestiones, la crisis económica y la necesidad de financiamiento han abierto una puerta al ingreso del capital privado, generando una división entre los hinchas: quienes ven en ello una oportunidad de crecimiento y quienes advierten sobre el riesgo de entregar el control del fútbol a intereses ajenos a los socios y la historia de los clubes.

Los promotores

Desde fines de la década del ´90 Mauricio Macri está intentando impulsar este modelo. Es más que recordada la gambeta que le hizo el ex presidente de la AFA, Julio Grondona, cuando avaló tratar el tema en la AFA donde Macri sufrió una derrota aplastante, pero ahora que la FIFA de Gianni Infantino promueve las SAD en el fútbol, el ex presidente volvió al ataque. 

Sin embargo fue Javier Milei quien selló la llegada de las SAD al país. En diciembre de 2023, mediante el Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023, el gobierno flexibilizó el ingreso de inversores privados al fútbol, permitiendo que los clubes puedan convertirse en sociedades anónimas sin necesidad de modificar la Ley del Deporte. Y lo profundizó a mediados del 2024 con la resolución 15/2024 de la Inspección General de Justicia. 

A esta avanzada se sumaron otras voces de La Libertad Avanza, como el ex candidato a presidente por el peronismo, Daniel Scioli, hoy flamante Secretario de Turismo, Ambiente y Deporte del gobierno de Milei y Juliana Santillán Juárez Brahim, la diputada libertaria que desde la red social de Elon Musk, “X” difunde mensajes a favor de las SAD y que además es esposa de Guillermo Tofoni, el socio argentino del empresario norteamericano Foster Gillett, aportante privado del club de Sebastián Verón, Estudiantes de la Plata, y quien está enfrentado a Chiqui Tapia por derechos de comercialización de la selección argentina. 

El gobierno de Milei, ejecutor de una estafa con cripto activos, quiere brindarle garantías a los clubes argentinos a través de las SAD…

Los ejecutores

Esta iniciativa ha sido respaldada por sectores empresariales y por dirigentes políticos que argumentan que la profesionalización y modernización del fútbol argentino requieren de una inyección de capital externo. Son los empresarios argentinos los que están avanzando con la oleada privatizadora, han invertido en clubes del ascenso y en ligas más chicas como la uruguaya. Algunos dicen que los capitales extranjeros van a apuntar a la “clase media” del fútbol argentino: los clubes medianos porteños y los grandes del interior. 

Están de forma encubierta, pero actualmente existen de hecho Sociedades Anónimas Deportivas en argentina con el eufemismo de “gerenciamiento”, como es el caso del club Riestra del ex mediático abogado Víctor Stinfale a través de su empresa de bebidas energizantes; del club del ascenso San Miguel que recibe dinero del empresario de eventos Federico Almada; o Talleres de Córdoba vía su presidente Andrés Fassi, relacionado con el Grupo Pachuca; también Defensa y Justicia del empresario Christian Bragarnik

Sin embargo uno de los primeros clubes en explorar esta nueva estructura fue Estudiantes de La Plata. Bajo la gestión de Verón, la institución estableció negociaciones con el empresario estadounidense Foster Gillett, quien se presentó como inversor interesado en potenciar el proyecto deportivo del club.

Gillett, hijo del expropietario del Liverpool George Gillett, propuso una inversión inicial de USD 150. Sin embargo, su historial en la gestión deportiva genera dudas. En Inglaterra su familia estuvo involucrada en la crisis financiera del Liverpool, mientras que en Francia su paso por el Grenoble Foot 38 dejó deudas y conflictos con los hinchas. A pesar de las promesas iniciales, la concreción de la inversión en Estudiantes ha sido problemática. El empresario debía completar el pago de un préstamo al club, pero hasta la fecha solo ha transferido cinco millones de dólares.

Los hinchas

El avance de las SAD en Argentina no solo implica un cambio en la administración de los clubes, sino una transformación en su función social. Durante décadas, los clubes han sido espacios de inclusión y pertenencia, donde el fútbol se ha desarrollado como un bien común accesible a toda la comunidad. Pero como se describió al comienzo de la nota, las pésimas condiciones de algunos clubes, la diferencia económica y posibilidades entre los clubes “grandes” y los “chicos”, generaron un caldo de cultivo de un cierto apoyo entre los aficionados. Experiencias en otros países han demostrado que la llegada de capitales privados no garantiza éxito deportivo ni estabilidad financiera. En muchos casos, los clubes terminan convertidos en mercancías que cambian de dueños según las fluctuaciones del mercado, perdiendo su esencia y dejando de lado los intereses de los socios. La privatización pone en riesgo el modelo “sin fines de lucro”, priorizando la rentabilidad económica por sobre la identidad y el arraigo popular de cada institución. 

Mientras los empresarios llenan sus bolsillos, el avance de la crisis económica y social profundizada por el gobierno del “criopto bro” estafador de Milei es cada día más evidente y uno de los sectores más afectados es el de los jubilados, quienes todos los miércoles se manifiestan frente al Congreso siendo reprimidos en varias oportunidades por la patotera de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Pero este último miércoles, hinchas autoconvocados del club Chacarita se sumaron a la última marcha de los jubilados y nuevamente fueron reprimidos, las imágenes causaron indignación lo que derivó en una convocatoria multitudinaria para el próximo miércoles a la que adhirieron hinchas de todos los clubes del fútbol argentino. La pregunta es si será este el desafío de los hinchas, garantizar que el fútbol siga siendo un espacio de identidad colectiva conectada con otros sectores y no una simple oportunidad de lucro.


Marcela Stein

Martes, Marzo 11, 2025 - 19:15

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