Hacia una gran jornada nacional de lucha

Desde la Unidad Piquetera se está llamando a confluir a una jornada de lucha para el 14 de septiembre, a otros sectores: estudiantiles, de trabajadores formales, derechos humanos.

La devaluación posterior a las elecciones PASO generó una fuerte presión sobre los precios de alimentos que en los últimos 12 meses llevan una acumulación de más del 120% (IPC). Sin duda, cualquier excusa le sirve a los grandes distribuidores de alimentos para remarcar precios. Así podemos ver que en este rubro la inflación mensual y anual generalmente estuvo por encima de la media.

Esta situación impacta muy fuerte en los sectores con más bajos ingresos o con ingresos irregulares. Alrededor del 40% de la población percibe salarios, pensiones y jubilaciones por debajo del índice de pobreza. Fijado por el INDEC en $203.361, y el umbral para no ser indigente en $94.148. Mientras que el salario mínimo, vital y móvil con la última actualización se ubicó en los $118.000 y la mitad de este monto es lo que perciben los beneficiarios del Potenciar Trabajo. La canasta básica total para una familia tipo es de $248.962. Y los datos de desocupación no se reflejan muy altos (7%) pero hay que atender que en dicha encuesta una persona que declara haber trabajado 4 horas en la última semana es considerado ocupado.

Estas cifras evidencian una situación social donde se está sobreexplotando a la clase obrera, realizando una transferencia de ingresos desde los que menos tienen hacia los grandes empresarios, banqueros, monopolios y multinacionales. Son ellos sin duda los grandes ganadores de la etapa. Quienes frente a un gobierno en retirada continúan presionando para exprimir aún más a la clase obrera y el pueblo.

Los resultados de las PASO generan más incertidumbre. La devaluación posterior deterioró aún más los ingresos. La inflación no para y la recomposición que anunció Massa no alcanza para hacerle frente a la situación. Primero porque es poco y segundo porque es sólo por dos meses, ya que no se convocó al consejo del salario para estos aumentos. Por otro lado, para los millones de trabajadoras y trabajadores que realizan sus tareas en el ámbito informal o economía popular, o trabajan para las plataformas no se anunció ninguna medida que los ayude a recomponer ingresos y hacer frente a la inflación.

El único camino posible es luchar contra el ajuste de Massa y el FMI, al tiempo que le marcamos la cancha a los que vengan. Nuestro terreno siempre fue la calle. Allí podemos hacer jugar nuestra fuerza como pueblo movilizado. Seguirán y se multiplicarán las operaciones mediáticas por televisión y redes sociales atacando a los y las luchadoras, pero también se multiplicarán las muestras de solidaridad entre los distintos sectores del pueblo. En la medida que quieran seguir avanzando sobre la clase obrera, habrá respuesta y esa respuesta debe ser cada vez más organizada, cada vez más coordinada.

Ellos quieren ir corriendo los límites de lo posible, de lo “aceptable”. Nuestro modelo para enfrentarlos es Jujuy: Frente a los intentos de avasallarnos, nos plantamos con rebeldía y organización. Sosteniendo los comedores, asambleas, reuniones de delegados, debatiendo entre los compañeros y compañeras las estrategias para enfrentar a los ajustadores. Si quieren robarnos los sueños, no los dejaremos dormir.

En este sentido la acción nacional del Frente de Lucha Piquetero de fines de Agosto con un piquetazo en el centro porteño y la movilización a Plaza de Mayo sirvió para denunciar cómo impacta en el pueblo la crisis social y económica que estamos atravesando. Sirvió también para sacudir el escenario político, donde un sector todavía se lamía las heridas después de los adversos resultados electorales.

Los que no fueron de la partida, plantean sumarse a la próxima jornada nacional y la Unidad Piquetera saldrá con todos sus componentes a dar batalla en las calles. Desde la CUBa-MTR nunca abandonamos nuestro espacio de lucha. Fuimos impulsores de la acción de lucha en la 9 de Julio y le estamos poniendo mucha militancia para que la próxima jornada de lucha seamos decenas de miles en las calles para enfrentar el ajuste del gobierno y del FMI y al mismo mandar un mensaje claro a nuestro pueblo. Acá no se rinde nadie. Seguiremos luchando por mejores condiciones de vida, por trabajo, por aumento de salario, por educación y salud públicas. Ahí estará la CUBa, como siempre junto a docentes, estudiantes, médicos y pueblo que lucha para defender nuestras conquistas.

Mientras tanto convocamos a todas las organizaciones que están resistiendo o están dispuestas a resistir a reunirnos para organizar una gran jornada de lucha nacional para el próximo 14 de septiembre.

Víctor Pucará