#8M Segundo Paro Internacional de Mujeres Salgamos con todo a las calles

Una fuerza poderosa recorrerá el mundo en el Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras y Luchadoras.

En distintos puntos del país se están llevando a cabo asambleas masivas para preparar el próximo 8M. La fecha -luego del exitoso primer Paro Internacional de Mujeres (PIM)- está incentivando y convocando a miles a organizarse y llenar las calles, anunciando una gran jornada de lucha que se desplegará en diversas ciudades del mundo. De esta manera con entusiasmo se van calentando motores para construir un poderoso grito colectivo por todos nuestros derechos que recorrerá el globo. En 2017 el 8M marcó un avance en la lucha del movimiento de mujeres a nivel internacional, haciendo punta Argentina con la consigna “Ni una Menos el Estado y los gobiernos son responsables”. De allí se desplegaron una serie de movimientos masivos tendientes a desnaturalizar la violencia machista y los abusos denunciando a quienes otrora parecían intocables, instalándose el debate en los grandes medios de comunicación proporcionando un marco común para las próximas movilizaciones. Sobre esta base en nuestro país instalada esta jornada de lucha y con la fortaleza creciente que venimos construyendo, tenemos el desafío de seguir avanzando en un contexto que requiere que el movimiento de mujeres de manera independiente de los gobiernos, salga junto a los distintos sectores en lucha a enfrentar el ajuste, la entrega y represión del macrismo y los gobiernos provinciales; a la par de seguir peleando por todas las reivindicaciones comunes por los cuales movilizamos hace tiempo.

Contra el ajuste la entrega y la represión vamos al paro y a llenar las calles

En este marco proponemos que las asambleas masivas se repliquen en los lugares de trabajo para arrancar a las direcciones sindicales un verdadero paro el 8M, que sea activo y combativo estando codo a codo trabajadoras y trabajadores en pie de lucha por nuestras demandas específicas, contra la reforma laboral, previsional, los despidos, el miserable 15% de aumento salarial, y toda la política antiobrera en curso.
La predisposición está y el contexto lo exige. La lucha en las calles deslegitimó la reforma previsional y dejó vidrioso el camino hacia la reforma laboral. A la vez que movió la estantería a toda la dirigencia sindical, saliendo del paso parte de la CGT y la CTA con la convocatoria a una movilización que intenta esquivar el paro que se agita por abajo, mientras los despidos se resisten con gran participación de las mujeres en las luchas agitando el recuerdo del famoso “ponele fecha” en la semana del 8 de marzo pasado. Teniendo como antecedentes aquel marzo caliente y un diciembre que mostró la fuerza de la clase en las calles, el PIM es una oportunidad para profundizar este camino de la mano del paro y la lucha callejera para quebrar las políticas antipopulares de Cambiemos que hacen estragos en las mujeres del pueblo.
Somos las mujeres trabajadoras y de los sectores populares las que llevamos la peor en contextos de ajuste creciendo entre nosotras la pobreza y la precarización, la doble jornada laboral, las muertes por abortos clandestinos, la explotación en las redes de trata y los feminicidios como la consecuencia más atroz de la violencia machista. Por eso es importante que ninguna se quede afuera de esta jornada peleando el paro y llenando las calles desde cada frente de lucha organizando también asambleas y actividades en los lugares de estudio y barrios para salir con todo como lo venimos haciendo, lejos de toda victimización construyendo un movimiento de mujeres combativo dispuesto a dar batalla ante la falta de respuestas de los gobiernos.
Este 8M vamos al paro y a las calles contra el ajuste y las reformas del macrismo, por trabajo salud y vivienda digna, contra los despidos, por aumento salarial, por igual salario igual tarea, jardines en los lugares de trabajo y estudio. Para seguir avanzando en la lucha por educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal seguro y gratuito para no morir. Para gritar fuerte por Maira Benitez exigiendo su aparición con vida y la de todas las mujeres desaparecidas y el desmantelamiento de las redes de trata y explotación sexual al amparo del Estado. Para poner el cuerpo contra la violencia machista, los feminicidios y crímenes de odio contra las mujeres lesbianas y trans, exigiendo presupuesto acorde y efectivo para políticas públicas integrales de prevención y asistencia. Para decir basta a nuestra cosificación y los estereotipos que nos quieren sumisas. Para levantar nuestros puños contra la persecución y la represión a las luchas obreras y populares. Para profundizar el grito de Ni una Menos el Estado y los gobiernos son responsables, ese grito que nos fortalece y guía la lucha visibilizando la responsabilidad de los distintos niveles de gobierno en el agravamiento de nuestras problemáticas advirtiendo como todas las violencias que sufrimos son legitimadas desde el Estado que continuamente genera y reproduce nuestra explotación, subordinación y los estereotipos opresivos que nos vulneran. Ese grito que nos permite cuestionar todo y que nos convoca a levantar las banderas de la revolución y el socialismo.
Este 8M preparemos una gran jornada de lucha y que se escuche en el mundo entero nuestro grito de rebelión contra toda forma de explotación y opresión.
Julia Quinteros