24 de Marzo - Enorme demostración popular

El 24 de Marzo una multitud conmemoró un nuevo aniversario del comienzo de la última dictadura cívico - militar. Con centro en la Plaza de Mayo, en todo el país se desarrollaron movilizaciones que repudiaron el golpe de Estado, reivindicaron a las y los 30.000 detenidos – desaparecidos y continuaron con la exigencia por los crímenes cometidos; pero sobre todo fue la principal manifestación de rechazo al gobierno de Milei. 

El elenco libertario viene lanzando una provocación tras otra a la lucha popular por Memoria, Verdad y Justicia, reivindicando el terrorismo de Estado, poniendo en duda el número de desaparecidos o instalando el tema de la amnistía a los genocidas. El spot sobre el 24 que lanzó el gobierno, llamando a la “memoria completa”, es lo último en esta saga que busca reinstalar la teoría de los dos demonios. Más que una “batalla ideológica”, lo que se busca es abrirle paso a la impunidad.

Si bien no se pueden atribuir de manera directa al gobierno, en el último mes se produjeron dos hechos repudiables que llevan la marca del discurso reaccionario y fascista del mileismo: el ataque a la compañera de HIJOS Rosario en su casa y las amenazas a Teresa Laborde, la hija de Adriana Calvo nacida en cautiverio. ¿Son estas las “brigadas anti orcos” que pregonaba el ex presidente Macri? ¿Se trata de ataques de “patrullas perdidas” o cuentan con vínculos con el poder estatal? Sea cual fuere la respuesta a estas preguntas, la conducta ante estos hechos debe ser inflexible: ni un paso atrás. 

A todo esto se suma el ataque a las condiciones de vida de las masas que significa el plan económico del gobierno. El ajuste, los salarios a la baja, los despidos en el estado y el sector privado, el recorte de planes sociales y alimentos, el discurso antiderechos, el cipayismo frente a las potencias imperiales: toda esta política antipopular fue repudiada el 24.

El debate sobre el 24

Desde hace varios años la actividad central por el 24 de Marzo se viene desarrollando con dos actos en la Plaza de Mayo: uno encabezado por la Mesa de Organismos y otro por el Encuentro Memoria Verdad y Justicia. La división viene de los años en que el kirchnerismo en el poder impulsó la cooptación estatal del movimiento de Derechos Humanos. La iniciativa del EMVJ por enfrentar dicha política permitió sostener un espacio de referencia por fuera de los compromisos con el gobierno de turno, al tiempo de denunciar sin atenuantes las violaciones actuales a los derechos del pueblo. 

Con la llegada al gobierno del macrismo, la necesidad de acortar distancias entre ambos espacios se puso sobre la mesa, con avances concretos como fue la movilización contra el “2x1”, con el que la Corte Suprema pretendía beneficiar a genocidas condenados. La magnitud del ataque contra el pueblo que está llevando adelante Milei actualizó este debate. Vastos sectores movilizados en torno al tema impulsaron la necesidad de un acto único, con el antecedente del movimiento de mujeres durante el 8M.

Sin embargo, lo que primó fue el divisionismo. Por el lado de la Mesa de Organismos, privilegió unificar la fecha con las conducciones de las centrales sindicales, de conducta más bien timorata en el enfrentamiento a Milei. Dicho sea de paso, la presencia pública de Gerardo Martínez, acusado de colaborar con el Batallón 601, es una afrenta a la lucha que tan valientemente encararon durante años las Madres, las Abuelas y los Hijos. 

Por el lado del EMVJ, se impuso la línea de los partidos del FITU de proponer “un acto con dos documentos”. De este espacio salieron consignas tales como “contra el ajuste de Milei y los gobernadores”, y la exigencia a las centrales sindicales de un paro general. Toda esta fraseología de izquierda, que pone en pie de igualdad a los blancos principales y secundarios, hacía fácil adivinar el propósito de que hubiera dos documentos en un mismo acto: libertad para atacar a aquellos con los que se pretende unificar. Por supuesto, tal propuesta fue rechazada, favoreciendo en los hechos el aislamiento de la izquierda de un amplio sector que reclama orientación para enfrentar al gobierno.  

Detrás de estas discusiones, está la orientación de una manifestación que moviliza a cientos de miles en todo el país hace muchos años, y la expectativa en amplios sectores de golpear con un solo puño al gobierno en una demostración contundente, que se vio frustrada. En momentos en que la lucha contra el gobierno de Milei requiere de la mayor claridad posible, estas conductas divisionistas y sectarias alientan la confusión. 

Todo ello no impidió que la movilización popular del 24 se expresara en toda su magnitud. Pero el debate de cómo enfrentar a Milei en este y el resto de los campos quedó abierto. Al respecto nuestro partido -al igual que otras organizaciones y organismos de Derechos Humanos de ganada reputación como la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos- sostuvo hasta el final la necesidad de una manifestación unificada, y se movilizó en consecuencia. 

Presentes ahora y siempre

Junto a la reivindicación de las y los 30.000 detenidos - desaparecidos y la lucha contra el ajuste de Milei, el PRML llevó a la Plaza de Mayo y a las plazas de todo el país el ejemplo revolucionario de Elías Semán, Beatriz Perossio y todos los camaradas de Vanguardia Comunista detenidos - desaparecidos, represaliados por el terrorismo de Estado por su pertenencia comunista; los detenidos en la iglesia de la Santa Cruz cuando colaboraban con las Madres de Plaza de Mayo, por los camaradas que terminaron sus días en el Vesubio -en cuyos juicios atestiguó nuestro camarada sobreviviente Guillermo Lorusso- y todos los mártires de la lucha por la Liberación, la Revolución y el Socialismo. Llevamos la conducta de nuestro secretario general Roberto Cristina, quien en la mesa de tortura gritaba, “¡Viva la Patria, viva la Revolución, viva la clase obrera!”: en ese ejemplo se templan las nuevas generaciones que sostuvieron en alto las banderas y lo seguirán haciendo hasta la Victoria. 

Facundo Palacios

Camaradas de marzo

Pedro Guillermo Rubio, dirigente estudiantil de Tucumán, detenido el 24/3/76 y secuestrado del penal el 5/4.

José Pablo Bernard. Abogado asesor de sindicatos, secuestrado el 07/03/76. 

Aldo Sampanini. Trabajador de Ledesma, secuestrado el 07/03/76.