Provincia de Buenos Aires: base estratégica de Cambiemos

Así como una de las principales razones de la derrota del FPV hay que buscarla en los resultados de la Provincia de Buenos Aires, la estabilización de Cambiemos y su futuro también dependerán en gran parte de lo que pase en dicho lugar. No solo por la importancia económica o electoral (36% del padrón) Allí se combinan una conflictividad permanente de trabajadores ocupados y desocupados con extensas franjas de marginación y pobreza estructural; además de los altos grados de corrupción y descomposición de las fuerzas de seguridad, que tanto como órganos de represión y persecución popular sirven al poder pero también comparten favores y complicidades con intendentes, con el narcotráfico y con el crimen organizado.
El traslado y designación de Cristian Ritondo (pata peronista del Pro) en la cartera de Seguridad -de vínculos estrechos con Granados-, como la designación del nuevo jefe de policía perteneciente a la cúpula histórica de la Bonaerense, junto con la cooptación de algunos funcionarios de Scioli (Ferrari de Asesoría General, Crotto de Turismo, Budassi de ARBA, Perechodnik ex consultor de campaña) le dan identidad al tema. A la vez aplica el mismo formato nacional para el resto del gabinete: Villegas, ex Telecom, Ministro de Trabajo; en Educación va Finocciaro desde CABA, en donde hizo su trayectoria a base de desconocer y perseguir delegados de Ademy; como Ministro de Gobierno va Salvai, un pura cepa Pro; y en la cartera de Asuntos Agrarios fue confirmado Sarquis, ex directivo de Monsanto y lobbysta de agroquímicos y transgénicos.
La red de 60 intendencias retenidas por el radicalismo, las ganadas por el Pro (Morón, 3 de Febrero, Quilmes, Mar del Plata y La Plata) más el acuerdo político con los legisladores de Massa y algunos intendentes que negocian por su cuenta prescindiendo del FPV, hablan de la amplitud del entramado para la gobernabilidad pero también de su escasa consistencia. Con un déficit publicado de $15.000 millones, el debut de Vidal requiere el inmediato auxilio nacional para enfrentar el pago de sueldos y aguinaldos de los empleados públicos, que están en una cifra cercana a los $10.000 millones. La prueba inicial del consenso estará en la Legislatura, puesto que la gobernadora requiere la aprobación presupuestaria de $70.000 millones para cubrir los pasivos de “una provincia quebrada”. Allí mismo permanecen latentes los conflictos de Cresta Roja, la toma de tierras en Merlo Gómez y las múltiples demandas menores que se acrecientan con el aumento desbocado de los precios en vísperas del fin de año. Los términos de la colaboración de Massa para el funcionamiento de la Legislatura y la aprobación de políticas o leyes son de tiempo condicionado, en la medida en que las aspiraciones para disputar la dirección y recomposición del peronismo provincial van de la mano con la disputa por la dirección nacional del mismo.
Diciembre siempre fue difícil en el conurbano pero si no se arranca cubriendo las necesidades básicas de trabajadores y jóvenes empobrecidos antes que nada, no será con uniformados, entramados y amenazas la mejor forma de garantizar su gobernabilidad.

Elbio Rojas