Misiones - Condena contra la rebelión docente

Jueves, 18. Diciembre 2025

A fin del mes pasado, el Juzgado Correccional y de Menores N°1 de Posadas condenó a dos referentes de la gran lucha docente que se produjo en la provincia entre mayo y junio de 2024. Mónica Gurina y Leandro Sánchez fueron encontrados culpables de “desobediencia judicial” y “entorpecimiento del transporte”, dando lugar a penas en suspenso de 10 y 8 meses de prisión respectivamente, más 8 horas mensuales de tareas comunitarias.
La sentencia se apoyó en que ambos docentes habrían incumplido de forma “dolosa” la orden de despejar una calle. Para sostener la acusación, la fiscal María Laura Álvarez presentó como testigos a agentes policiales, que con sus declaraciones apenas si pudieron sostener el planteo de la fiscalía. Esto no fue escollo para dictar una sentencia que busca castigar la lucha del pueblo. En medio de un proceso masivo, multisectorial y apoyado en asambleas, elegir a dos referentes otorgándoles semejante poder de dirección es lisa y llanamente un escarmiento político.
El fallo desató un rechazo inmediato de los sindicatos docentes no oficialistas, entre otros sectores sindicales y populares. Fue convocado un paro provincial de 24 horas y a asambleas zonales el jueves 27, además de una movilización al Palacio de Justicia el lunes 1° de diciembre, cuando se leyeron los fundamentos de la sentencia.
La gran rebelión de 2024 marcó un antes y un después: la provincia se vio atravesada por la lucha de docentes y trabajadores de la salud, que empalmó con el reclamo de la policía. Estos sectores acamparon en el centro de la capital provincial y hasta se movilizaron al domicilio particular de Carlos Rovira, quien controla el poder político misionero. En aquella oportunidad, el 7 de junio la docencia logró un aumento que llevó el salario inicial a $450.000 -un 47,5% acumulado- junto con un compromiso oficial de no sancionar administrativa ni legalmente a quienes participaron, acuerdo que acaba de ser roto por la Justicia.
La represalia judicial que instrumentó el gobierno se da en el final de un año marcado por una lucha docente que, si bien no alcanzó en intensidad la del 2024, de todas formas se destacó por las jornadas de paro y por las asambleas. El intento de meter miedo con causas está condenado al fracaso: la docencia misionera lleva en su espalda una experiencia de lucha de la cual difícilmente se la pueda hacer retroceder. 
Ileana Ambriz

Jueves, Diciembre 18, 2025 - 12:00

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