El ajuste ya llegó Y la resistencia también

Viernes, 13. Noviembre 2015

El pasado 2 y 3 de noviembre el Concejo Deliberante cordobés, con mayoría propia de la UCR, aprobó en dos sesiones express un paquete de medidas absolutamente impopulares. Entre estas están la suba del 28% de la tarifa de transporte que lleva el costo del pasaje a $9,15 ($8,25 para el usuario); la del impuesto inmobiliario con un 27% de aumento -un porcentaje similar de aumento tendrán también los taxis y remises-; la aprobación del Código de Convivencia Ciudadana que tiene multas más caras y que entre sus puntos más controversiales se prevén sanciones a “el grupo de personas, individuo, agrupación, organización social, política, sindical, que cause una alteración al tránsito, mediante la obstrucción de la vía pública”. Sumado a todo esto también le dieron la primera sanción, con apoyo de UPC-PJ, a la creación de un ente por fuera de la estructura orgánica del municipio, que contará con plena autarquía administrativa para encarar por sí mismo, o bien a través de terceros, las obras y servicios que determine el Ejecutivo (peligrando así numerosos puestos de trabajo).
Nuevamente, y antes de asumir su segundo mandato, Mestre junto con su falsa oposición demuestran que los negociados con las empresas monopólicas son el único compromiso firme entre los versos de la campaña.
Luego de haber prometido durante la campaña que no habría aumentos del boleto de transporte urbano en lo que resta del año, Mestre vuelve a asegurar para los cordobeses el más caro y peor servicio de transporte público de todo el país. El apuro por ajustar tiene sus razones en los compromisos asumidos con las empresas a cargo del transporte urbano (ERSA y Coniferal), y con la adjudicataria del servicio de Red Bus (Siemens). Durante los cuatro años que lleva gobernando la ciudad, el radicalismo aumentó en más del 360% la tarifa de transporte. Esto implica ganancias multimillonarias para las empresas a cargo, entre las cuales se destaca ERSA, que también es propietaria de la recolectora de residuos LUSA, y vinculada al propio Mestre. Esta empresa acaba de quedarse con el control de todo el corredor 7, y los interurbanos que tenía Ciudad de Córdoba, acaparando 33 líneas urbanas y gran parte de las interurbanas.
Respecto del nuevo Código de Convivencia Ciudadana, es evidente el afán recaudatorio que lo guía, buscando engrosar las arcas municipales a costas de vendedores ambulantes, peatones, motociclistas y automovilistas, mientras mira para otro lado a la hora de reclamar el pago de impuestos a los grandes contribuyentes. Por otro lado, la búsqueda por disciplinar la lucha y las organizaciones populares, ya tiene antecedentes en otras grandes ciudades, como también hay sobradas demostraciones de que una firme y unitaria actitud por parte de las organizaciones en defensa irrestricta del derecho a manifestarse libremente, es suficiente para transformar estas legislaciones en letra muerta.
La sorpresiva creación del ESyOP -Ente de Servicios y Obras Públicas- generó una inmediata reacción por parte del SUOEM (Sindicato de trabajadores municipales). No es para menos. El Ente permite al Ejecutivo evitar cualquier tipo de control en la práctica, sometiéndose simplemente a un “balance anual” por parte del Tribunal de Cuentas. Esta maniobra, inspirada en otras experiencias en Rosario, Tigre y Río Cuarto, aunque mucho más ambicioso: permite manejar con manos libres un 30% del presupuesto municipal (aproximadamente $4.000 millones anuales).
Estado de alerta y movilización, asambleas y cortes de calle sorpresivos son las primeras señales de la preocupación del SUOEM acerca de su futuro laboral a lo que se suma la extendida protesta en el Hospital de Urgencias por deuda salarial, insumos y equipamiento. La lucha por la defensa de los puestos y condiciones de trabajo en el municipio, la posibilidad de enfrentar los negociados que se vienen con los servicios públicos, el rechazo a los tarifazos y la defensa activa de los métodos de lucha que los trabajadores y el pueblo cordobés han incorporado en su experiencia histórica, son ejes de conflicto que marcarán los próximos meses en la ciudad. Es por esto que es primordial apostar a la unidad y lucha de los trabajadores y todos los sectores populares para que, en la calle, podamos hacer frente exitosamente a los tiempos que vienen.

L.F.

Publicado en: 
Viernes, Noviembre 13, 2015 - 23:00

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