Ocupar y cortar las calles de barrios, pueblos y ciudades
Que el paro sea una jornada activa de repudio al ajuste de Macri y el FMI
Un pilar del plan de ajuste del macrismo, como... Ver más
El brote de sarampión en el AMBA es un signo de época. El liberalismo se impregna de maneras complejas en el entramado social, y estos casos testigo sirven para pensar en la ideología dominante de nuestros tiempos.
Empecemos por la relevancia del acceso a las vacunas. La primera persona infectada había viajado al exterior previo al inicio de sus síntomas. No tenía un registro claro de vacunación: es decir, no se sabe si tenía o no la vacuna. La siguiente persona infectada fue un bebé menor de un año. La vacuna triple viral, que cubre sarampión, se aplica a los a los 12 meses en nuestro país porque se sabe que comenzando el esquema a esa edad la inmunización es de entre un 95 y un 98% del total de vacunados (antes de esa edad, el cuerpo está protegido por anticuerpos de la leche materna y la inmunización es menor). Esto significa que hay una pequeña proporción de la población que, aunque esté vacunada, no está inmunizada. Pero si la proporción de inmunes es alta, las chances de que el virus circule son muy bajas. Este era el efecto rebaño del que tanto se hablaba cuando se desarrollaba la vacuna del Covid.
La ideología liberal propone que se vacune solo aquel que lo desea y, de paso, reparte falsa información sobre el daño que supuestamente provocan las inmunizaciones. La discusión es sobre la libertad: si uno fuese una persona en riesgo de sufrir daño grave, ¿no debería vivir libre de que los demás me contagien de enfermedades enteramente prevenibles? Tal vez, la libertad sea un fenómeno dialéctico, donde las libertades individuales y las colectivas son dos momentos de una unidad diferenciada.
Hace un mes, vimos cómo había comenzado el vaciamiento de las áreas de vacunación y control de HIV, tuberculosis y hepatitis, echando a personas con tareas imposibles de reemplazar en el corto plazo por su particularidad técnica. El 5 de marzo renunciaron las direcciones de estas mismas áreas, dejando un comunicado que alerta sobre el riesgo del colapso inminente de la salud pública. Ese es el objetivo que persigue el gobierno, que desde el discurso y desde la acción favorece a los privados. En esta secuencia, en un tiempo se van a vacunar sólo quienes puedan pagarlo.
La antítesis a esa tendencia es lo que se plasmó el jueves 27/2 en las calles del país. La Marcha Federal de Salud logró unificar las luchas en curso bajo la bandera de la "Defensa de la Salud Pública". La lógica de la unidad es la única que puede hacer flaquear al gobierno. A pesar de que los golpes no parezcan estar entrando en lo inmediato, elementos como la criptoestafa o la devaluación que se aproxima van a desvelar el verdadero carácter de Milei y su banda a las mayorías trabajadoras, y va a ser esa construcción de unidad que practicamos hoy lo que nos va a plantar con más fortaleza, con un programa de salida y con capacidad de coordinarnos cuando la lucha se vuelva inevitable.
Octavio Ruiz
Ocupar y cortar las calles de barrios, pueblos y ciudades
Que el paro sea una jornada activa de repudio al ajuste de Macri y el FMI
Un pilar del plan de ajuste del macrismo, como... Ver más
Desde la asunción del gobierno de Mauricio Macri en diciembre las noticias no fueron buenas para los trabajadores, la devaluación de la moneda aceleró la inflación, aumentaron los alimentos... Ver más
Hace un tiempo que las y los trabajadores de SOSCH vienen marcando el camino en la defensa de sus derechos. La gestión provincial de Capitanich se reviste de un discurso "progresista e inclusivo... Ver más