Buenos Aires y CABA I Paritarias docentes

Martes, 15. Marzo 2016

Desde la asunción del gobierno de Mauricio Macri en diciembre las noticias no fueron buenas para los trabajadores, la devaluación de la moneda aceleró la inflación, aumentaron los alimentos básicos, los servicios y, próximamente, el transporte. A esta profundización del ajuste hay que sumarle los miles de despidos que comenzaron en el Estado y que dieron vía libre al sector privado para hacer lo mismo, y ante ésta situación, el gobierno planteó las paritarias con un techo del 20 al 25% con una connotación más que extorsiva ya que de exigir mayor aumento se incrementarían los despidos.

El paro y la movilizacióndel 24/02 fueron una demostración de que los trabajadores están dispuestos a enfrentar los despidos, el ajuste y a pelear por la reincorporación, paritarias libres, etc. La paritaria docente, muchas veces testigo, se arrancó en un marco ridículo y vergonzoso de ambas partes, el gobierno nacional y los representantes sindicales. En un comienzo, la Provincia de Buenos Aires ofreció un 23,6% que fue rotundamente rechazado, como sucedió con la mayoría del resto de las provincias. Esto dio lugar a la intervención del Gobierno Nacional que comenzó a reunirse con los docentes para darle “una ayuda” a las provincias quienes sostenían no poder pagarles a los docentes por no tener caja. Desde esas reuniones se propuso un engañoso 40%, porcentaje que coincidía con lo reclamado por los gremios pero que no era real. Luego de idas y vuelvas, cuartos intermedios, postergación de reuniones y demás se firmó el acuerdo a nivel nacional, el cual sólo tiene un impacto en el FONID (incentivo docente) y en bonificaciones no remunerativas, es decir, que engrosa las sumas en negro del salario. Lo que sirvió para enmascarar una paritaria que supuestamente conformaría a los docentes dejando bien parados a los gremios y al gobierno, teniendo en cuenta que al salario docente lo eleva sólo a $7.800 en marzo y a $8500 en agosto, o sea un aumento que va del 25 al 33% en el mejor de los casos.
Sin embargo, son las provincias las encargadas de cerrar las paritarias y dónde realmente se define el aumento, en el caso de la Provincia de Buenos Aires, la paritaria se cerró inmediatamente después de acordada la Nacional. Si bien se superó el techo que se propuso inicialmente, el aumento siguió siendo insuficiente. El porcentaje acordado fue de un 28,5 en tres cuotas, febrero, marzo y julio, que no tiene casi incidencia en el salario básico, achata la escala salarial y el ítem por antigüedad, como referencia se considera el salario de un maestro que pasa de $3300 a $4200 (el resto es no remunerativo). De este modo, en la Provincia de Buenos Aires y en la CABA (con porcentajes similares) se comenzaron las clases con supuesta normalidad, entre ambos distritos se suma el 40% de la matrícula nacional, por eso es tan importante. Lo que no se termina de comprender es cómo se firma un acuerdo tan insuficiente para los docentes, con comienzo de clase y sin conflicto.
Se desprende de esto dos conclusiones: Por un lado, los docentes lograron superar el techo salarial propuesto inicialmente, si bien el aumento es insuficiente tuvo esta virtud. Por otro lado, para el gobierno haber iniciado las clases en ambos lugares implicó un triunfo para la contención social (teniendo en cuenta los 17 días de paro que hubo en 2014 al inicio y los esporádicos pero contundentes paros del 2015).
Para que la burocracia sindical pudiera firmar este acuerdo tuvo que mentir, presentar porcentajes engañosos y generar confusión entre los docentes, de otra manera, no hubiera sido aceptada la propuesta. Los mecanismos que utilizó para aprobar el aumento fueron igual de ridículas que las negociaciones, una vez presentado el supuesto aumento de 34% se llevó una planilla a algunas escuelas para que mediante la misma se aceptara o no y el resultado, también engañoso, fue relativo: si bien fue aceptado en la mayoría de los distritos en muchos se rechazó, entre los que estuvieron los 9 conducidos por la oposición de la Multicolor, pero también donde la Celeste de Baradel es conducción como Tres de Febrero, Avellaneda, Mar del Plata e Ituzaingó. La cúpula sindical terminó cerrando la paritaria a su antojo sin blanquear el real acuerdo haciéndoles un gran favor a Vidal y Macri dejando pasar el ajuste, haciendo la vista gorda ante la precarización de la educación pública y vendiendo una vez más el salario de los docentes.
En rechazo a la insuficiente paritaria, las seccionales Multicolor llamaron al paro y no inicio y se movilizaron junto a ATE a la Gobernación de La Plata el lunes 29/02, pero esto no fue suficiente para movilizar a las bases docentes, en la mayoría de las escuelas las puertas se abrieron y las clases comenzaron. No fue así en todo el país, en ocho provincias las clases no se iniciaron (Córdoba, Santa Fe, Mendoza, Entre Ríos, Chubut, Neuquén, Tierra del Fuego y Santa Cruz) y en otras se inició el ciclo lectivo aunque las paritarias no se hayan cerrado. Al día de la fecha la Provincia de Córdoba continúa con el conflicto por la negociación paritaria y los docentes están en asamblea permanente hasta que el gobierno provincial mejore la oferta que ronda el miserable 25% para todo el año. En similar situación se encuentra a Provincia de Santa Fe que analiza una propuesta del 34% pero que aún está en conflicto. Nota aparte se merece la situación de los docentes de Santiago del Estero quienes en asamblea decidieron continuar con paro indeterminado y marcharon cerca de 10.000 docentes a la capital de la provincia por aumento y blanqueo del salario. Allí fueron duramente reprimidos por la policía y dos docentes fueron golpeados y detenidos, esta situación agudizó la bronca y decidieron continuar con el paro y hacer marchas en las ciudades y a nivel provincial. Mientras tanto, CTERA sin tomar medida alguna le hace el juego al gobierno, dejando pasar el ajuste y la represión.
Descripta la situación, cualquiera se preguntaría ¿cómo los docentes bonaerenses y de CABA aceptaron tan pacíficamente dicho acuerdo, teniendo como parámetros los años anteriores donde se convocaron y adhirieron a masivos paros y movilizaciones a La Plata? El papel de la burocracia lamentablemente fue fundamental, la confusión que promovió caló en la docencia, la mala información o desinformación jugó a su favor, la convocatoria a asambleas o consultas dejaron a su antojo la decisión a tomar. Pero no hay que desestimar el rol que también cumplen las 9 seccionales opositoras (multicolor) y la bronca que se va a ir desatando en los docentes cuando perciban el ridículo aumento o cuando el acuerdo no se cumpla del todo. Lamentablemente, la Multicolor está teñida de disputas internas que hacen que no se pueda unificar en una posición de lucha que enfrente los ataques del gobierno provincial y que destrone de una buena vez a la burocracia de la Celeste que históricamente ha jugado en contra de los docentes. En el caso de la CABA, el sindicato Ademys hace un tiempo viene siendo atravesado por disputas similares, lo que no contribuye a la organización de aquellos docentes que quieren agruparse y pelear por un salario digno y mejores condiciones para la educación.
Para los tiempos que vienenes fundamental contar con un espacio en donde se puedan organizar en unidad al conjunto de la docencia. Es primordial convocar desde ahora a reuniones, asambleas, plenarias, etc. en donde se pueda discutir la reapertura de paritarias, rechazar la represión a la protesta social y construir una organización que enfrente la políticas de ajuste que se implementan sobre los trabajadores y sobre la educación pública. Será fundamental para canalizar el descontento de los docentes, junto con la reivindicación del resto de los reclamos históricos de la docencia como IOMA, infraestructura, etc. y darles una respuesta organizativa es el rol principal que debe tomar la Multicolor en Provincia y la oposición nucleada en Ademys en Capital para conformarse como una real alternativa combativa. No se puede esperar los tiempos de la burocracia, la discusión y la organización no sólo es previa a la firma de paritarias, es todo el año, más cuando los acuerdos salariales y la situación política nacional son tan desfavorables para los docentes y el conjunto de los trabajadores.
Alejandrina Acosta

Publicado en: 
Martes, Marzo 15, 2016 - 16:45

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