Anuncian despidos en el sector petrolero

Hace varios números que ve¬nimos planteando la falsedad del boom de Vaca Muerta, que por un lado muestra su lado especulativo y parasitario con la apertura de centros comer¬ciales e inversiones no ligadas al sector productivo y, por el otro, una actividad que se encuentra estancada producto de un escenario internacional con el petróleo a la baja y que incluso avanza con el recorte en los puestos de trabajo.
El sector petrolero viene más oscuro de lo anunciado. Hacia mediados de mayo Guillermo Pereyra, Secretario General de los Petroleros de Neuquén, Río Negro y La Pampa anticipa¬ba 400 despidos en el sector. Esta situación no sólo atravie¬sa a las firmas extranjeras sino que también las nacionales están en la misma situación: “Empresas locales tienen pro¬blemas de dinero: algunas es¬tán demorando en el pago de sueldos e inclusive pagando en dos partes, algo que nunca había ocurrido”, esto incluyen¬do a YPF.
Lo que parece sorprenderle a Pereyra -que también es se¬nador nacional por el MPN- es una crisis que se encuentra atravesando diversos rubros. El cierre de Cerámica Neuquén el año pasado en la región o la propia realidad de las autopar¬tistas a nivel nacional -que el año pasado estuvo en el centro del debate a partir de la lucha de Lear en la Zona Norte de Gran Buenos Aires- son reflejo de esta situación.
Es que la crisis que en un mo¬mento el gobierno intentó ocul¬tar anunciando que se estaba “blindado” pasó ahora a los topes salariales. Es una situa¬ción que no toca fondo aún en el país.
En este marco, la actitud del actual dirigente es la de espe¬rar pacientemente la resolu¬ción. Frente a esto, no tardaron en expresarse voces contrarias y ahora hasta el mismo Moya¬no se trepó a este descontento saliendo hacia adelante con un llamado a conformar un gremio de “Camioneros Petroleros”, expresando una verdadera disputa entre los sectores del sindicalismo más rancio. Esto debilita aún más al dirigente sindical que venía desarrollan¬do una carrera política por den¬tro del MPN.
Pero volviendo al inicio, esta situación profundizará aún más la realidad de desigual¬dad neuquina y de la región que venimos marcando en los no transar de este año. Y por supuesto también la verdadera cara de la “nacionalización de YPF”, que de la misma manera que los monopolios extranjeros ante el achicamiento de la ren¬tabilidad apunta a descargar la crisis hacia los trabajadores con despidos.
Una recesión en el sector pe¬trolero es una mala noticia para la provincia cuyo principal in¬greso proviene de allí. El 33% de las personas que trabajan en el sector privado provincial, unas 33.500, están registra¬das en dos sectores: petróleo y gas, y actividades que están ligadas como el comercio ma¬yorista y minorista.
Mención aparte merece la lu¬cha que vienen protagonizan¬do los sectores frutícolas de la región por subsidios a la activi¬dad primaria con los cortes de ruta y los estatales nucleados en ATE con tomas de estable¬cimientos por aumento salarial y contra la precarización labo¬ral.
Ambos son ejemplos a tener en cuenta en el marco de esta situación que ponen un piso en las medidas de lucha apostan¬do a la unidad de los sectores populares, junto a la izquierda, el combativismo y los que lu¬chan en un polo para terminar con los intereses antipopulares de monopolios, sindicalistas traidores y sus representantes políticos como la tarea inme¬diata.
Nicolás Sánchez